jueves, 18 de junio de 2009

Si UPN y Barcina no rectifican sus acusaciones de connivencia con los terroristas se rompera la interlocución en Pamplona


Como Secretario General de Pamplona quiero hacer algunas consideraciones al comunicado de ayer del grupo municipal de UPN, que consideramos básicas por su transcendencia política y, diría más, ética.
En esta ocasión, el grupo municipal de UPN y Yolanda Barcina han traspasado todos los límites de lo tolerable, al cometer la incalificable deslealtad de vincular nuestra actuación política con el entorno de ETA.
Sobre este grave tema queremos expresar las siguientes consideraciones:
Las mociones objeto de crítica son iniciativas del Partido Socialista que venimos formulando a lo largo de toda esta legislatura y cuya postura no ha variado en absoluto. Así que ni obsesión, ni hostigamiento y sí absoluta coherencia.
Es probable que hoy Yolanda Barcina no fuera la alcaldesa de Pamplona si, como se asegura en el comunicado de UPN, los socialistas utilizásemos los votos de ANV en nuestro propio interés político.
Consideramos indecente que el Grupo Municipal de UPN y Yolanda Barcina, como responsable directa del mismo, viertan contra los socialistas una acusación tan grave como falsa, como es que mantengamos una estrategia conjunta con ANV para hostigar a la alcaldesa. Se trata de una bajeza que no aceptamos bajo ningún concepto, por un elemental principio de ética política. Esta falsedad únicamente oculta la propia incapacidad de Yolanda Barcina.
Esta acusación denota una falta grave de talante democrático y surge al confundir nuestro derecho a la discrepancia y a la crítica política con un supuesto hostigamiento obsesivo hacia la persona de Yolanda Barcina. Barcina actúa como si tuviera mayoría absoluta y considera que los socialistas deberíamos ofrecerle permanentemente nuestra incondicional adhesión.
La falta de talante obedece a lo que ella denomina valores y principios, que le llevan a traspasar líneas reprobables desde el punto de vista ético. Efectivamente, los suyos no son nuestros valores y principios.
Valores y principios los nuestros que nos llevan a afirmar, como ya hicimos hace un año, que si hay el menor uso político perverso en el recinto que pide utilizar la Plataforma Gora Iruñea, seremos los propios socialistas quienes presentemos una iniciativa para que en el futuro no se autorice dicho recinto.
Igualmente es perverso e inconsecuente atacarnos por criticar el modelo policial impuesto por UPN, y materializado por Simón Santamaría, con el argumento de que está amenazado por ETA, cuando de todos es conocido que los concejales y cargos socialistas estamos igualmente amenazados sin excepción y no por eso -como vemos- UPN deja de criticarnos.
La utilización del terrorismo con fines partidistas, como tanto ha llegado a hacer el PP, supone una de las mayores perversiones de nuestro sistema democrático.
Hoy mismo, en una tertulia de radio, el Portavoz de UPN se ha atrevido a afirmar que el PSN ha pactado las mociones que mañana van a Pleno con ANV. Mentira y gorda. Mentira y gorda. Ni esta, ni ninguna moción, ni en el pasado ni en el futuro se han pactado ni se pactarán con ANV. Me repugna y me asquea haber sido testigo de esta infamia y del desahogo con que la ha vertido el Sr. Iribas.
Y entre tanto, Yolanda Barcina prodiga una imagen victimista , apelando a una supuesta persecución y hostigamiento por parte de los socialistas. Esa estrategia, falsa e hipócrita, esconde otra realidad evidente, como es su propio nerviosismo y una autoestima que le lleva a creerse mucho más de lo que es.
Por todo ello, y dada la grave acusación del grupo municipal de UPN, si no se produce una rectificación clara y contundente por su parte, nos veremos imposibilitados en mantener cauces de interlocución política con quienes afirman que utilizamos el voto del mundo terrorista.
Así que, o UPN rectifica o a partir de ese momento, la labor política del grupo municipal del PSOE tendrá un único ámbito de debate: las salas de comisiones y el propio salón de Plenos del Ayuntamiento de Pamplona.
En todo caso, los socialistas garantizamos a los pamploneses nuestro compromiso con la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos y ciudadanas de Pamplona, con sentido de la responsabilidad, porque lo que es bueno para Pamplona también lo es para los socialistas.

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