Viene a este Pleno la pertinente modificación del Reglamento de Organización de la Policía Municipal que se deriva de la Ley Foral 8/2007, de 23 de marzo, referida a las Policías de Navarra. Nuestro Grupo va a aprobar dicha modificación pues, además de suponer la adecuación del citado reglamento a la legislación foral, supone una serie de mejoras organizativas internas que, entendemos, redundarán en un mejor funcionamiento de nuestra Policía Municipal. Además, se da la circunstancia de que dicha modificación ha logrado concitar el apoyo unánime de las organizaciones sindicales que representan a la plantilla policial. Este hecho, se da a pesar -o precisamente por ello- del evidente y ya con UPN endémico, malestar existente en nuestra policía. Y digo que este acuerdo se produce precisamente debido a este malestar, pues uno de los principales aspectos positivos de esta modificación, va a ser que se va a reducir la discrecionalidad existente en Policía Municipal y que tanto vienen denunciando los distintos sindicatos.
El Partido Socialista, ha mostrado de forma constante su defensa, apoyo incondicional y compromiso con la Policía Municipal de Pamplona. Fruto de ello, son nuestras numerosas propuestas, aportaciones normativas e incrementos en la plantilla de la policía local que hemos ido logrando. Igualmente, ha sido inequívoco nuestro apoyo y solidaridad con cuantos mandos y policías han sufrido amenazas, agresiones o cualquier otro aspecto negativo proveniente de ETA u otras organizaciones ilegales. Tampoco hemos escatimado nuestro reconocimiento a la labor eficaz que, de forma mayoritaria, realiza la Policía Municipal, con una mención especial a todo lo referido a la prevención, sanción y mejora del tráfico en nuestra ciudad.
Precisamente todo ello, nos ha permitido denunciar con absoluta coherencia y legitimidad, los comportamientos y actitudes individuales inadecuadas así como los planteamientos y responsabilidades políticas que se vienen produciendo en lo que, para nuestro Grupo, es una mala gestión de UPN al frente de la Policía Municipal. Lamentablemente, el cambio de alcaldía no llevó aparejado el relevo, tan solicitado por la mayoría de este Pleno, al frente de la jefatura de nuestra policía. Y los comienzos políticos del nuevo concejal delegado se nos antojan, en el mejor de los casos, como polémicos y poco afortunados.
Así las cosas, y por no redundar en otros aspectos que podrían desviar el tema a debate, no alcanzamos a comprender el empecinamiento de UPN por incumplir, antes de ser aprobado, el Reglamento que nos trae a Pleno, al menos por lo que hace al Art. 26 referido a la Brigada de Seguridad Vial, produciendo un doble incumplimiento: pues además de lo señalado, lo ha hecho vulnerando otro Art., en este caso el 19, que hace referencia a las competencias de la Brigada de Proximidad. Pero, con ser este incumplimiento grave, lo es más el trasfondo político que esconde: UPN se ha empecinado en cambiar lo que tan eficaz se ha demostrado en materia de seguridad vial, sin argumentos de peso, de manera unilateral, experimental y nada razonada.
Eso sí, esta medida afecta, curiosamente, de manera directa a unos representantes sindicales y a algunos policías que -será casualidad- nunca se han mostrado sumisos ante lo que han interpretado como actuaciones arbitrarias de los mandos policiales. Por cierto, y además de lo dicho, y aun siendo un aspecto menor: ¿se han parado a pensar en las consecuencias negativas que se derivan del desmantelamiento de lo que hasta ahora tan bien funcionaba en lo referente al próximo concurso de traslados?. En fin, para qué seguir.
Señores de UPN. Mucho es lo que de bueno tiene nuestra policía. De ello, como de lo malo, son también ustedes los responsables. La oposición, haciendo honor a su nombre, tiene la obligación de controlar y criticar los aspectos que entienden negativos de la acción de gobierno. En el caso de nuestro Grupo, además, tal y como he referido, han sido constantes también los apoyos, propuestas y mejoras con que hemos contribuido al mejor funcionamiento de nuestra policía. Pero ustedes siguen con la asignatura pendiente en su labor al frente de Policía Municipal. Las actuaciones unilaterales y algunas formas autoritarias, casan mal con el modelo que requiere una policía de proximidad como debiera ser la nuestra. El necesario grado de discrecionalidad y autoridad -que no autoritarismo- no están reñidos con una eficaz y discreta gestión que aleje de la polémica a nuestra policía. Por eso vamos a apoyar, como siempre hacemos con todo lo que entendemos positivo para Pamplona, este Reglamento que esperamos respeten y cumplan, y que sirva para enmendar una labor política tantas veces polémica e incorrecta al frente de la Policía Municipal que, no alcanzamos a comprender, porqué se empeñan en mantener.
Intervención de Eduardo Vall en el Pleno del 1 de marzo de 2012
No hay comentarios:
Publicar un comentario