APROBAMOS UN MOCIÓN PARA QUE SE ELABORE UN PLAN MUNICIPAL DE ATENCIÓN A LA INFANCIA

Intervención de Pilar Ferrero en el Pleno del 7 de noviembre de 2013

Voy a ser muy breve porque nuestro posicionamiento político en relación al Programa de Atención a la Infancia y Familia ha quedado ya suficientemente conocido tanto cuando hemos intervenido en defensa de los equipos sociocomunitarios de los distintos barrios como recientemente en los Comisión de Asuntos Ciudadanos cuando se ha abordado la situación en la que se encuentran los profesionales que trabajan en las distintas unidades de Barrio de este programa.

Quisiera recordar que con la Ley Foral 15/2006 de 14 de diciembre de Servicios Sociales y con la aprobación en 2008 de la Cartera de Servicios Sociales quedó definido que el Programa de Atención a la Infancia y Familia responde a cuatro servicios básicos.

Se trata de una prestación garantizada cuyo objeto es el de promover que los menores tengan un entorno que permita su desarrollo personal mediante actuaciones en el ámbito de su comunidad, previniendo la aparición de situaciones de desprotección e impulsando formas de apoyo dirigidas a corregir y modificar estas situaciones.

El papel que juega la atención primaria en la atención de la infancia , abarca un amplio abanico de acciones que va desde actividades encaminadas a la sensibilización de la comunidad acerca de las necesidades de niños, a la detección y valoración de las situaciones de desprotección o de riesgo de que ésta se produzca, a los programas de prevención primaria dirigidos al conjunto de niños de un territorio y a programas de prevención secundaria y a la intervención familiar cuando se evidencien situaciones de desprotección leve o moderada.

En enero de 2011, se llevó a cabo una reorganización del área de Bienestar Social, que en lugar de mejorar el funcionamiento está provocando un desmantelamiento de los equipos especializados, produciendo consecuencias directas para la ciudadanía.

El Equipo de Atención a la infancia y Adolescencia ha reducido considerablemente el número de familias atendidas, al reducirse a tres, las profesionales que conforman el equipo. 

Tienen una ratio de atención de 25 a 30 familias, no pudiendo atender a ninguna familia nueva hasta que no se produce una vacante. Los nuevos casos son atendidos por los equipos de infancia de los barrios, que en la actualidad se encuentran saturados y sin capacidad de intervenir ante situaciones de la misma gravedad, que atiende el equipo especializado.

Los datos con los que contamos son abrumadores los equipos de infancia y familia de las unidades de barrio han incrementado el número de casos de desprotección detectados en los que interviene. 

En concreto, a finales de noviembre del 2011 se atendía a 288 familias, un año después, a 460, y en mayo de 2013, a 583. En estos momentos se está interviniendo con más de 600 familias con el mismo personal. Hay profesionales que atienden 160 casos a la vez. Con estos datos es muy difícil, por no decir imposible, realizar un trabajo serio y continuado en el tiempo.

En los momentos de crisis económica y social en la que nos encontramos, es aún más necesario subrayar la importancia que tiene la inversión en la infancia con equidad. La inversión en la infancia es la que presenta mayores efectos positivos, no sólo en el desarrollo económico de una sociedad, sino también en su desarrollo integral. 

Invertir en la infancia es fundamental para romper el círculo de la pobreza y reducir las desigualdades existentes en una sociedad.

En este sentido, la pobreza y exclusión social de la infancia son temas especialmente sensibles y complejos, ya que dada su naturaleza multidimensional, debe abordarse únicamente desde una forma integrada: reconociendo la necesidad de apoyar a las familias con hijos, fomentando el acceso al mercado laboral de los padres y madres, adoptando medidas de conciliación, respaldando a los hogares con bajos ingresos, facilitando el acceso a servicios de calidad (sanitarios, educativos, vivienda y entorno favorable) y fomentando la participación de los niños en las políticas que les afectan. Sólo con este enfoque global, se conseguirá reducir la tasa de pobreza y exclusión social de los niños y se favorecerá su bienestar.

Por eso, nuestro grupo entiende que para nuestra ciudad es necesario diseñar un Plan de Atención a la infancia y a la adolescencia que de respuesta a las distintas necesidades de la población infantil y adolescente. 

Me gustaría recordar que si queremos realizar un trabajo de utilidad y no un mero trámite, el plan debe partir del estudio de la realidad que presenta la infancia y adolescencia por tramos de edad y distribución en los distintos barrios de nuestra ciudad. Sólo si somos capaces de tener una fotografía de la situación actual y si logramos hacer una estimación de los próximos cuatro años el plan será la hoja de ruta que nos guiará en nuestra toma de decisiones.

Este plan, para que sea válido tendrá que tener definido su metodología de trabajo que tiene que sustentarse en los criterios de participación, interdisciplinaridad y trabajo en equipo.

Si la finalidad última del Plan es contribuir a mejorar el bienestar y la calidad de vida de nuestros menores, este objetivo requerirá la identificación de sus necesidades sociales, de sus problemas y aspiraciones, así como los de sus familias y la propuesta de acciones positivas que faciliten su consecución. Por cierto una vez más volvemos al tan anhelado mapa social que ustedes alegremente siguen saltándose a la torera.

Volviendo al tema, entre las distintas fases del proceso de elaboración, me gustaría nombrar la fase de análisis de los diferentes programas y medidas que se están desarrollando en relación con la infancia y la adolescencia. 

Sólo desde un análisis valiente y veraz de los problemas que presenta el programa de infancia y adolescencia seremos capaces de proponer objetivos y líneas de actuación y criterios de evaluación que nos permitan , por una parte mejorar los actuales servicios y por otra diseñar actuaciones innovadoras para una mejor atención a las necesidades presentes y futuras de la infancia.

Me gustaría terminar diciendo que si queremos que el plan tenga las máximas garantías de efectividad, tiene que contar con el trabajo de los profesionales de las distintas área y con las aportaciones de las distintas entidades y agentes sociales que trabajan con la infancia, y evidentemente para que llegue a buen término tendrá que ser liderado por la responsable del área y prever la cuantificación y financiación de las diversas actuaciones.

· No nos quiera vender esta burra que está sin dientes. Estamos hablando de cosas diferentes. Estamos en distintos niveles de atención.

· Me estoy refiriendo a distintas prestaciones de atención a la infancia, que están relacionadas con la detección, recepción, investigación, valoración, diagnóstico y establecimiento del plan de intervención, prestaciones que son y que corresponden a los servicios sociales de base.

· Son servicios de atención primaria.

· Servicios que están contemplados en la cartera de servicios sociales y en la Ley Foral 15/2006, de 14 de diciembre

· Estos servicios son garantizados y están contemplados en el Decreto de Financiación.

· Cuando usted habla de servicios de intervención familiar llevados por la empresa Kamira, estamos hablando de otro nivel distinto de intervención. Estamos hablando de niveles de atención secundario. 

· Se está interviniendo ya sobre el menor y la familia que requiere una intervención porque ha sido diagnosticado por las unidades de base como un menor en situación de desprotección moderado.

· Esta prestación es una prestación complementaria.

· El artículo 31, en el punto 4 lo aclara y dice al respecto lo siguiente: se podrá completar el nivel de intervención en atención primaria con el desarrollo de otros programas o actuaciones que implementen las entidades locales en su ámbito territorial, dentro de sus competencias.

· Le veo sacando pecho y no puedo nada más que recordarle que desde el 2011, ustedes se han cargado los servicios sociales especializados

· Y además no han sido capaces de haber puesto en marcha el centro de servicios sociales que estaba previsto en el Plan estratégico 2008-2012 del Departamento de políticas Sociales.  El gobierno de Navarra tenía la obligación de financiar este centro, tal y como lo señala la disposición adicional tercera de la Ley Foral 15/ 2006, de 14 de Diciembre de Servicios Sociales, y ustedes han dejado pasar esta oportunidad.

· Por el contrario, Estella y Tudela cuantan ya con este servicio.

· En fin póngase a trabajar y las familias de Pamplona se lo agradeceremos.

ACUERDO:

1.      Instar al Equipo de Gobierno Municipal a que elabore un Plan Municipal de Atención a la Infancia y Adolescencia, designando una persona responsable y liberando dos meses a jornada completa a tres profesionales de este programa.

2.      Instar al Equipo de Gobierno Municipal a que cumpla el Decreto de Financiación de Servicios Sociales, que establece un mínimo de 6 Trabajadores/as Sociales y 12 técnicos de integración para el Programa de Atención a la Infancia y Familia.

3.      Instar al Equipo de Gobierno Municipal a que establezca acordes al contenido del Programa unos ratios adecuados de número de casos por profesional.

4.      Instar al Equipo de Gobierno Municipal a que sustituya las bajas laborales y ausencias de los/as profesionales del programa para garantizar la correcta atención a la ciudadanía.

5.      Instar al Equipo de Gobierno Municipal a que cubra el puesto de Responsable Técnico/a mediante concurso de méritos antes de finales del año 2013.

6.      Instar al Equipo de Gobierno Municipal a que refuerce el Equipo especializado de Atención a la Infancia y Adolescencia (EAIA) hasta completarlo con tres Trabajadores/as Sociales, tres Educadores/as y dos psicólogos/as.